Entorno

San Sebastián es una pequeña ciudad pero que esconde un buen puñado de rincones que no deberías perderte:

 

La Concha es la joya donostiarra por excelencia y uno de los mayores emblemas de Donostia / San Sebastián, es el marco incomparable. Situada en frente de la isla Santa Clara, la playa de La Concha llena las revistas y los periódicos y ha sido seleccionado como la Playa número uno de Europa y en España.

 

Tesoros de la parte vieja:
Murallas, cañones y fortalezas guardan los más preciados tesoros donostiarras: los pintxos! Disfruta de bajar al
puerto y callejear por la Parte Vieja disfrutando de sus famosos pintxos, placeres culinarios en miniatura, y mercados como por ejemplo, el Mercado de La Bretxa.

 

Descubriendo la arquitectura:
Para adentrarse en los tesoros arquitectónicos de la ciudad, el recorrido empieza en el mar y sigue el curso del río Urumea y sus magníficos puentes.
Desde el primer puente, el Puente de la Zurriola, se observan los modernos cubos de Moneo del Kursaal (simulan dos rocas varadas en la arena) a un lado y el impresionante conjunto con un diseño típico de la Belle Epoque al otro, formado por el Teatro Victoria Eugenia y el Hotel Maria Cristina, de cinco estrellas.

Date un chapuzón en la playa más extensa de Euskadi y fascínate con los pintxos de los bares y el ambiente que se respira. Camina entre viñedos de ‘txakoli’ con una vista única del mar, después siéntate a la mesa para probar los productos locales y, por último, vete de compras por tiendas originales y cuidadas.

Popular pueblo pesquero que no pasa desapercibido por su rico patrimonio histórico (cuya joya es la Iglesia de San Salvador) y la curiosa silueta del monte San Antón, más conocido como “Ratón de Getaria”. También fue cuna de ilustres personajes como el navegante Juan Sebastian Elkano y el modisto Cristóbal Balenciaga. En sus estrechas calles y puerto se pueden saborear los mejores pescados a la “Parrilla” acompañados del vino llamado “Txakoli”.

Hondarribia  es  uno de los pueblos más encantadores del País Vasco. Su bien conservado casco antiguo, un ambiente marítimo relajado y buena comida son solo algunas de las razones que hacen que Hondarribia sea uno de nuestros lugares favoritos.

 

Hondarribia (Fuenterrabía ) es un colorido pueblo pesquero rico tanto en arquitectura como en gastronomía. Todo un placer, tanto para los ojos como para el estómago.

 

Además de su impresionante oferta gastronómica, Hondarribia cuenta con un Casco Viejo muy bien conservado, rodeado de una muralla medieval, la única de la provincia de Guipúzcoa. Su laberinto de estrechas calles adoquinadas y el gran Castillo de Carlos V consiguen trasladar al visitante a un paseo por la Edad Media.

 

Aparte del Casco Viejo, Hondarribia cuenta con otra zona no menos emblemática que la anterior, se trata del barrio de la Marina. Es aquí donde se encuentra la mayor parte de los bares y restaurantes que han dado fama a la localidad. La calle principal que se extiende a lo largo del barrio es peatonal, está alineada con árboles y llena de hermosas casas y establecimientos en los que comer o degustar de los famosos pintxos típicos de la zona.

 

No hay que olvidar que Hondarribia es un pueblo costero y como tal, se puede disfrutar de su hermosa playa, la cual se extiende 800 m, ofreciendo arena y tranquilas aguas tanto a locales como turistas.

Chillida Leku es un museo único, confeccionado en sí mismo como una gran obra de arte. En él la fusión entre arte y naturaleza se produce de una manera natural. Las esculturas se integran en el paisaje como si siempre hubieran formado parte de él. En el jardín, las hayas, los robles y los magnolios conviven con las monumentales esculturas de acero y granito ubicadas en perfecto diálogo con el entorno.

Desde allí se pueden apreciar excelentes paisajes, tanto de Hernani y sus alrededores como de Jaizkibel y el mar. Del fuerte sólo quedan restos semiderruídos de sus muros. Al amparo de sus murallas se encuentra un edificio que dispone de un pequeño bar y mesas de piedra preparado para el disfrute del medio natural.

Disfrute de cualquiera de las espectaculares modalidades de pelota vasca con cesta, en la que prima la técnica y la gran velocidad.